- Una dona acompanya una altra dona més gran
- Dues dones despatxen a la peixateria del Mercat de Sant Antoni
- Una treballadora d’una fruiteria endreça els productes en una estanteria
Encuesta Omnibús 2024. En las mujeres, la pobreza de tiempo se asocia a peor salud mental, mala calidad del sueño y baja actividad física.
Un tercio de las barcelonesas sufren por falta de tiempo, según la encuesta Omnibús municipal del 2024. Las mujeres manifiestan tener más dificultades para hacer todo lo que tienen que hacer en un día y viven con la sensación constante de angustia.
Las mujeres trabajadoras tienen más probabilidades de ser pobres en tiempo que los hombres, y eso afecta a su salud. Esta es la conclusión que se desprende de la última encuesta Omnibús municipal, la edición de diciembre del 2024, sobre cuidados, pobreza de tiempo y brecha digital de género, en que se profundizó en el análisis de la pobreza de tiempo, que se entiende como la escasez de tiempo disponible para actividades personales y de ocio después de atender el trabajo remunerado y no remunerado.
Los resultados muestran que un tercio de las mujeres (32,2 %) y el 24,6 % de los hombres manifiestan no tener al menos tres horas libres para ellos mismos en un día laborable, una vez se han cubierto todas las necesidades básicas y las obligaciones laborales, formativas, domésticas y de cuidado de otras personas.
Por otra parte, un porcentaje significativamente más alto de mujeres declaran no tener suficiente tiempo para hacer todas las tareas cotidianas, especialmente las relacionadas con el cuidado de personas dependientes y la gestión del hogar. La brecha se hace más evidente en determinadas franjas de edad, como la de 35 a 54 años, en que la carga de responsabilidades familiares y laborales es más alta.
Y con respecto a la sensación de angustia de tiempo, un 59,6 % de las mujeres se muestran de acuerdo, frente al 49,6 % de los hombres. Esta percepción está relacionada con la carga de trabajo doméstico y de cuidados, que recae principalmente en ellas: las mujeres dedican una media de 8,5 horas diarias a los cuidados, mientras que los hombres les dedican 6,2. Además, un 17 % de las mujeres que tienen personas a cargo declaran dedicarse totalmente a ello, una tarea, a menudo, invisibilizada.
Finalmente, y en relación con la percepción sobre el tiempo dedicado a los cuidados, el 57 % de las mujeres y el 56 % de los hombres consideran que la dedicación es adecuada. Asimismo, hay más hombres (35,5 %) que mujeres (33,8 %) que consideran que el tiempo que dedican es insuficiente.